Hola, espero que estés muy bien! Hoy comparto contigo una consulta de una usuaria de mi nuevo programa T.T.V. (Transforma Tu Vida con el poder del presente) que creo que te interesará y servirá, ya que es más común de lo que uno pensaría.
Ana me decía que sentía que los demás la estaban «pasando por encima» (que se sentía como un «trapo de piso en muchas situaciones en su vida«) y que quería saber cómo poner límites sin generar conflicto con los demás. Ana me contaba de una situación puntual con un familiar concreto.
Y su consulta me pareció un excelente «disparador» para compartir contigo sobre algo TAN importante (y quizás de lo que poco se habla): el fascinante mundo de los límites sanadores.
Creo que estamos subestimando este tema. Quizás también, le tenemos un poco de temor. Sin embargo, los límites son un muy poderoso recurso para cuidar nuestra salud emocional y bienestar general.
¿A qué me refiero cuando hablo de «Límites Sanadores»?
La forma más gráfica de definir los límites sanadores es imaginar un escudo que nos ponemos a nosotras/os, una especie de «campo de fuerza». El objetivo de este escudo es protegernos y cuidarnos emocionalmente. Básicamente, implica que digas «sí» cuando lo que te piden o hacen (o no hacen) está en sintonía con tus valores, necesidades y objetivos, y que digas «no» cuando quieras preservar tu espacio, tiempo, energía, etc.
A mí me gusta pensar los límites como un cerco que contiene un hermoso jardín, con flores y plantas hermosas. El jardín soy yo, cultivando «mi mejor versión», con mis valores, mis necesidades, mi energía, mi familia, etc. Y los límites sanadores son el cerco que yo abro o cierro a quien quiero que pueda entrar y pisar el jardín.
¿Qué pasa si no ponemos límites?
No debemos tomar a la ligera el hecho de no saber decir «no» ni establecer límites saludables.
Muchos creen que por decirle que no a otras personas, eso los hace egoístas, mala gente, etc. Nada más lejos de la realidad.
Saber decir «no», cuando corresponde, no sólo es algo bueno y deseable…sino que, además, es ESENCIAL para tu salud física y emocional!
Muchísimos estudios demuestran que tiene más perjuicios de los que creeríamos. Yo misma me sorprendí descubriendo TODO lo que puede perjudicarnos…
Por ejemplo:
* Un estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology encontró que las personas que no ponen límites son más propensas a ser explotadas, manipuladas y abusadas.
* Otro estudio, publicado en el Journal of Applied Psychology, encontró que las personas que no ponen límites tienen más probabilidades de sentirse estresadas, ansiosas y deprimidas.
* Otro estudio del Journal of Social and Personal Relationships, encontró que las personas que no ponen límites probablemente tengan problemas en sus relaciones personales.
En cambio, poner límites (de manera saludable) tiene múltiples beneficios:
* Un estudio del Journal of Counseling Psychology encontró que las personas que ponen límites viven más felices, seguras, y satisfechas con sus vidas.
* Otro estudio, del Journal of Personality and Social Psychology, encontró que las personas que ponen límites probablemente tendrán éxito en sus carreras y relaciones personales.
* Otro estudio del Journal of Applied Psychology determinó que quienes ponen límites, probablemente son más saludables salud física y emocionalmente.
Básicamente, el no poner límites te expone a perjudicar tu salud física y emocional, a sufrir estrés, ansiedad y agotamiento, a exponerte a ser manipulada/o y que se aprovechen de ti…
Te daré algunos ejemplos reales con los que quizás te puedas sentir identificada/o:
– Laura, que tiene un corazón enorme y es sumamente generosa, está siempre dispuesta a ayudar a los demás. Pero como Laura no establece límites claros, se siente responsable de resolver los problemas de todos. Y esa enorme carga emocional la abruma, generando altos niveles de estrés y agotamiento que afectan su estado de ánimo y energía diaria.
– Daniela, que está hace varios años en una relación con una persona que la «exprime» emocionalmente. Como Dani no supo establecer límites en su relación, permite que su pareja cruce líneas inaceptables, una y otra vez. Esta falta de límites afecta su autoestima y la sumerge en una espiral de angustia, tristeza y desesperanza.
– Julieta es una profesional con mucho talento que deja TODO por su trabajo. Como ella no supo establecer límites con sus superiores y compañeros, termina constantemente asumiendo tareas excesivas y sufre de fatiga crónica, afectando notablemente su calidad de vida por falta de tiempo para su bienestar personal.
Imagina qué podría pasarles a ellas, en sus vidas, (y, si quieres, con la tuya) si pusieran límites sanadores:
1. Sentirían un gran bienestar físico, emocional y mental, porque se liberan del peso innecesario de tareas que no les corresponden o no quieren hacer, priorizando su salud, experimentando una mayor sensación de paz interior y autoestima, lo que les permite enfrentar los desafíos de la vida con mayor resiliencia.
2. Tendrían relaciones más saludables y auténticas con los demás, alejándose de personas y relaciones negativas, creando en torno a ellas espacios donde el respeto y el amor florecen.
3. Además, al decir «no» a lo que las consume y agota, preservarían su energía para lo que aman hacer, aumentando su productividad, enfocándose en lo que realmente importa y haciendo todo con mayor eficiencia.
4. Finalmente, a través de los límites sanadores, aprenden a priorizarse a ellas mismas para que así puedan ayudar a los demás. Es como cuando te dicen en el avión que te pongas tú primero la máscara de oxígeno para luego dársela a los niños. Si no estás bien tú, primero, es muy complicado y desgastante hacerlo para otros, al menos a mediano y largo plazo.
Muy importante:
Ten presente que, de ningún modo los límites son un sinónimo de egoísmo.
Por el contrario, son una herramienta necesaria para una buena autoestima, una vida plena y una demostración de amor propio, que es fundamental para el amor a los demás.
Si quieres aprender más sobre cómo poner, paso a paso, límites sanadores, desde HOY, para:
* Reducir el estrés y la ansiedad
* Mejorar la autoestima
* Aumentar la confianza
* Protegerte del abuso
* Crear relaciones más saludables
Y quieres hacerlo cumpliendo estos pasos:
1º Identificar tus necesidades y deseos.
2º Saber cómo y cuándo expresar tus límites.
3º Cómo hacerlo de modo firme (y cálido)
4º Sin miedo a decir «no» y sin sentirte culpable.
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