Si te gustaría obtener el máximo de la vida y de ti, si realmente quieres sentirte bien en los diferentes niveles que componen el ser humano (espiritual, mental y físico) es esencial desarrollar confianza y autoestima en ti y aprender a confiar en tus habilidades. A algunas personas, lo antedicho parece sucederles de modo espontáneo y natural, como si tuvieran un don innato. Sin embargo, otros necesitan trabajar duro para poder desarrollar “habilidades” de confianza y autoestima.
Uno de los mejores consejos que puedo darte para aumentar tu autoestima es empezar a ser una persona que actúa en lugar de reaccionar. Qué quiero decir con esto? Supongamos que decides empezar a hacer ejercicio porque deseas perder peso y tener una mejor salud. Sin embargo cuando llega el horario que habías previsto para, justamente, ejercitarte, te da sueño. Alguien que reacciona es aquél que, en este caso, se va a dormir porque “me agarró sueño”. Por el contrario, una persona que actúa, es aquella que, con determinación y seguridad, hace lo que había previsto hacer: aún cuando tiene sueño, no se va dormir sino que se ejercita.
Es muy común que las personas que tienen baja autoestima y poca confianza en sí mismas, en sus habilidades y talentos, tengan una tendencia a ser individuos que reaccionan en la vida (es decir que van hacia donde “las lleve el viento”, y por el viento podemos pensar tanto en otras personas como también en sus pasiones, sensaciones, etc.; cualquier cosa en lugar de la razón) y que nunca lograrán obtener las cosas que dicen anhelar.
En general, las personas con baja autoestima, aún cuando son personas inteligentes, no utilizan esto como una cualidad sino que la inteligencia se vuelve un arma en su contra. Por ejemplo: viven en una constante, intrincada y compleja autocrítica. Claudia es una persona que no solía terminar las tareas que le habían sido asignadas por su jefe. Ante la reprimenda de él, ella solía contestar
– no lo termine por qué no estaba quedando tan bien como lo quería yo.
En realidad ella está convirtiendo un defecto en una virtud porque lo que, verdaderamente Claudia se dice es que busca la perfección y no se conforma con menos, cuando en realidad ella no sabe organizarse bien, no confía en sus talentos y en sus habilidades para hacer bien el trabajo que se le ha pedido y ni siquiera es responsable para asumir lo que realmente está sucediendo. Se auto-engaña diciéndose que es una perfeccionista.
Te propongo que por los próximos dos o tres días simplemente prestes atención a tu diálogo interno, a esa voz interior que todos tenemos. Cada vez que te des cuenta que ella te está diciendo algo positivo o negativo, anotes las específicas frases. Por ejemplo, podrías encontrarte diciéndote “no soy lo suficientemente buena para hacer esta tarea” o “no estás a la altura de las circunstancias” o “eres una inútil” o “yo ya sabía qué iba a hacer esto mal”, etc.
Una de las herramientas más efectivas para aumentar la autoestima es llevar contigo un diario donde irás anotando este tipo de frases del diálogo interno y también, al mismo tiempo, aplicando técnicas concretas para aumentar la autoestima y la seguridad interna para así poder ir viendo tus progresos.
Nota: Estas técnicas te las daré a conocer en unos días.